¡Dios mío, todo caro!
Un día sos joven y al otro… andas por el supermercado y podrías estar teniendo un diálogo como el de la imagen: “ESTO ES MUY CARO”. Pero... ¿ACASO ESO ES TUYO?
A mí también me pasa. Ya sabes que cuando viajo me encanta explorar góndolas en los supermercados en busca de nuevos sabores mientras juego con los antojos de mi cuerpo. He aquí que me encontré con una manteca con trufas a un valor significativamente más elevado que la conocida manteca. Sabes lo que dicen, cuando viajas no pases los dólares a pesos. Claro, asomaron unos interesantes puntos de vista sobre el valor de esa manteca que mi cuerpo quería.
Unas de las grandiosas preguntas que Access tiene para regalarnos, y uso mucho en el supermercado, es: ¿A quién le pertenece esto? Lo que nos suele suceder es que tendemos a alinearnos y aceptar a TODO lo que pasa a nuestro alrededor o bien, nos resistimos y reaccionamos, en vez de reconocer que todo, absolutamente todo, es un interesante punto de vista.
Esta famosa pregunta te permite comenzar a reconocer que existe mucha influencia psicoemocional y que tú, como ser súper psíquico, percibes todo eso, crees que es tuyo y lo vuelves real.
¿Quién te dijo que algo es caro o barato? ¿Cuál es el punto de vista que hay ahí?
Las cosas solo tienen un valor que depende de la marca, de la valoración de la persona y/o de lo que se requiere para crear eso.
¿Qué punto de vista tienes sobre los precios?
Te quiero dejar un ejercicio:
La próxima vez que vayas a un restaurante, en vez de ver que comer en base al precio, observa que quieres comer, mas allá de lo que salga por tu puedes, tienes la personalidad, y te lo mereces...