¿Cuánto te estás contrayendo a ti para que otros te puedan recibir?

En la última clase de “El fundamento” que co facilite con mi amiga Ninfis Sánchez resultó interesante la charla que mantuvimos sobre la imagen que creamos para mostrarnos al mundo.

¿Cuál es la imagen que estoy proyectando a las otras personas para que me puedan recibir, que no tiene que ver con quien soy?

Veamos que es la imagen. Para mí es eso que yo estoy proyectando para que la gente pueda verme, pueda quererme, pueda aceptarme, pueda recibirme. Una imagen de acuerdo a lo que yo tengo que ser… según la edad, la nacionalidad, el dinero, la profesión, la religión.

Es empezar a ser consciente de cuál es esa imagen que tengo y, reconocer si esa imagen que proyecto tiene que ver con quien soy yo. Muchas veces, nada, armamos un personaje, montamos una historia. Desde algún lugar decidí que esa es la imagen correcta y perfecta para que la gente pueda verme y recibirme.

Por ejemplo, ¿qué imagen tienes sobre la gente rica? Bien vestido, con joyas o ropa con agujeros. ¿Eso en que se basa? En tus puntos de referencia. Conozco personas con muchísimo dinero que si los ves en la calle y ni calculas que tiene tanto dinero.

¿Cuánto te esfuerzas para crear esa imagen que se asemeje a la que has determinado que va con ser una persona exitosa, una buena madre, un buen padre? Y si de repente te miras al espejo y lo que ves no coincide con esa imagen basada en tus puntos de referencia de lo que es esa persona exitosa, entonces… ¿qué piensas acerca de ti?  ¿Qué puntos de vista tienes sobre ti? ¿Cuánto los usas para juzgarte y limitarte?

Estás dispuesta/o a desjuiciarte a ti y a tu cuerpo por todas las elecciones que has hecho?

¿Cuánto te estás contrayendo para que otros te puedan recibir?

¿Qué tal sería que sueltes esa imagen, esas etiquetas, eso que piensas que tiene que ser, para empezar a ser?

Esa imagen que terminas creando alrededor tuyo es como un muro, lleno de juicios de lo que debes ser y no estás siendo y de lo que estás siendo y no deberías ser, que en definitiva está creando lo correcto e incorrecto en ti. ¿Qué tal si destruimos y descreamos ese muro y simplemente somos?

Qué es lo que te gusta a ti

y qué es lo que quieres crear en el mundo

 

By Fede

P/D: Gratitud a quienes formaron parte de esta interesante charla